Aunque la diputada Laura Cartuccia haya declarado en la última sesión de la Cámara baja que el establecimiento del marco normativo regulatorio para el Sistema de Residencias de Salud se aprobó a partir de un trabajo conjunto con el Ministerio de Salud Pública y el Colegio de Médicos de Salta, esta entidad profesional se pronunció en contra de la medida aprobada con media sanción.
A través de un comunicado, el Colegio de Médicos se manifestó en contra del proyecto de Ley de Residencias Médicas. En representación de los profesionales matriculados de la provincia, la mesa directiva de la entidad médica aclaró su posicionamiento al respecto y remarcó que a pesar de la invitación recibida para la confección de la iniciativa, el Colegio “no estuvo involucrada en su elaboración y no comparte varios de los puntos planteados en el mismo”. “Consideramos que el estado de las residencias médicas en nuestra provincia está deteriorado, pero tras analizar el proyecto, no hemos encontrado propuestas que representen una mejora significativa”, enfatizaron en el documento.
El Colegio Médico indicó también que “ciertos aspectos del proyecto rozan la inconstitucionalidad” y en caso de ponerse en práctica “podrían resultar poco atractivos para los potenciales aspirantes a residencias”. El espíritu de la norma contrasta negativamente con lo que esta mesa directiva considera paradigmático para la formación y el ejercicio de la profesión médica” agregaron.
Cómo parte de su argumentación en el Palacio Legislativo, Cartuccia había precisado que el sistema de residencias – previsto en el Decreto Nº 1.277 del año 2000 y otras resoluciones- necesita modernizarse ya que las residencias médicas “son un pilar fundamental en la formación de los profesionales de la salud”, lo que constituye una materia relevante y que requiere su correspondiente regulación.
¿Qué establece la norma?
El proyecto, distribuido en 13 capítulos, clasifica a la residencia médica como “la formación intensiva de postgrado, remunerada, con dedicación exclusiva, basada en objetivos y competencias, destinada a incorporar, completar y perfeccionar los conocimientos adquiridos a nivel de grado universitario de profesionales de la salud; conforme un programa teórico-práctico aprobado por la Autoridad de Aplicación, que comprende la ejecución de una especialidad determinada, bajo orientación y supervisión en los establecimientos de salud públicos y privados de la Provincia. Y detalla que las modalidades pueden dividirse entre residencias básicas y residencia postbásica.
En lo referido a la duración y al ciclo lectivo anual, la iniciativa establece que cada residencia tiene una duración estipulada en el Programa de Formación Profesional de cada especialidad, según los marcos formativos de referencia vigentes, la disciplina y modalidad, la que puede ser modificada por resolución de la Autoridad de Aplicación (Ministerio de Salud). “El ciclo lectivo anual tiene dos recesos académicos. Su inicio y finalización son definidos por la autoridad competente, según la reglamentación”, precisa.
En lo concerniente a la estructura del sistema de residencias, el proyecto aprobado por la Cámara baja establece que la organización del sistema se compondrá de coordinadores, instructores, jefes de residentes, auxiliares, profesionales residentes, jefes de servicio, un comité asesor de docencia e investigación y otras unidades de gestión de conocimiento”.
El cumplimiento de las finalidades formativas de las Residencias depende, en orden jerárquico, del Jefe de Residentes, Instructor, Coordinador, Auxiliar o Referente Docente, Jefe de Servicio, Jefe de Programa, Programa de Recursos Humanos de nivel operativo, Gerente General de nivel operativo, Programas de nivel central que tengan incumbencia según la especialidad y Programa de Recursos Humanos del nivel central.
