Contradicciones y más creencias que certezas por el impacto del RIGI

“Así, tapándome la nariz voy a votar, pero por lo menos vine y no me escondí”, dijo un legislador del saencismo antes de entrar a la sesión en la que se aprobó la adhesión de la provincia al Régimen de Incentivo a las Grandes Inversiones (RIGI). Después de poco más de una hora de debate, el proyecto de adhesión recibió media sanción en Diputados. Ahora, el Senado tendrá la palabra final. Hay expectativas en el sector minero.

En un contexto bastante enrarecido y repleto de rostros incrédulos, las contradicciones políticas estuvieron a la orden del día. La oposición local, que a nivel nacional responde a Javier Milei, tuvo algunos reparos para con el posible aumento en las regalías mineras y el RIGI -que resultó ser una de las insignias de la Ley de Bases-; y entre las bancadas saencistas se llegó a tildar de “graciosa” o “poco aplicable” a la ley que después se aprobó con el voto mayoritario de los diputados presentes.

A poco más de una semana de haber recibido el proyecto enviado por el Poder Ejecutivo, la Legislatura decidió avanzar en su media sanción, el pasado 13 de agosto. Esa premura guarda correlato con las escenas observadas semanas atrás donde las frases “¿cuándo van a mandar el proyecto del RIGI?” y “todavía hay que esperar” eran las que resonaban en los pasillos del histórico edificio de calle Mitre.

El punto de mayor conflicto y confrontación entre los legisladores se originó a en la discusión por la adhesión de la Provincia al artículo 103 de la Ley Nacional 27.743 -Medidas Fiscales Paliativas y Relevantes-, mediante la cual se modifica el artículo vinculado a las regalías mineras fijadas en la Ley Nacional 24.196. La legislación faculta a las provincias a percibir en concepto de regalías un porcentaje que no exceda un 5% sobre el valor “boca mina” y tenga como piso el 3% que rige actualmente. Ante esta reforma, la oposición y algunos socios políticos del oficialismo aseguraron que “el cambio de reglas” no constituye un buen síntoma porque lejos de alentar las inversiones, “las espanta”. Además, criticaron que no se haya tenido en cuenta el pedido de mayor de diálogo que solicitaron las cámaras ligadas al sector minero sobre este tema.

“En un contexto de crisis, donde el precio mundial de la tonelada de litio se desplomó es inoportuno avanzar en este sentido. La ventana de oportunidades económicas se redujo de 30 a 10 años, incluso hay una empresa minera que tuvo que suspender su proyecto por los elevados costos de producción”, declaró el diputado del PRO José Gauffin.

“A mí me preocupa que algunos legisladores cambien tan rápido y que en poco tiempo pasen de decir que este gobierno regala nuestros recursos naturales por migajas a raíz de que las regalías eran bajas y ahora se oponen a la posibilidad de subirlas. No quieran poner un manto de sospecha en esto. El 3% siempre impactó como poco, no seamos necios porque la adhesión no significa la suba automática de dichas regalías”, enfatizó con vehemencia Socorro VIllamayor.  

Un poco de escepticismo

Para el diputado Gerónimo Arjona hay que ser prudente sobre lo que puede generar una iniciativa como el RIGI en Salta, pero sobre todo en el departamento Los Andes, donde se concentra la mayoría de los emprendimientos mineros. “Todavía no ha llegado el impacto total de la minería. Esto se ve reflejado en la contratación de mano de obra local. Hoy, en San Antonio de los Cobres tenemos, por lo menos, 400 personas sin trabajo y a esto hay que sumarle que los proveedores locales muchas veces no son tenidos en cuenta. No solo hay que promover a los grandes inversores sino también a los pobladores del lugar”, aseguró el integrante del bloque Justicialista Gustavo Sáenz Conducción.

Suscribite al Newsletter

Para mantenerte informado

* campo obligatorio